Cartas íntimas de la «divina» Greta Garbo asoman su soledad.

Las cartas de la «divina» Greta Garbo asoman  su soledad

Después de tantos años, sale a la luz pública 65 misivas escritas por la actriz. «La Divina» Greta Garbo escribió cartas íntimas que narran su vida de soledad. La subasta saca a la luz cartas escritas por la actriz dirigidas a la guionista austrohúngara Salka Viertel. La única amiga y confidente que tuvo en 40 años.

Las cartas de la divina, manifestaban  su gran tristeza.
Las cartas de la divina, manifestaban su gran tristeza.

La divina Greta Garbo

Mujer de belleza extraordinaria, así era Greta Garbo, hermosamente «divina». También, la llamaban la divina esfinge sueca. Nunca fue expresiva y al llegar a Estados Unidos  con 20 años construyó un muro que la distanció  en silencio de cualquier intervención en su vida. En oportunidades bajaba la guardia: «Estoy cansada, nerviosa y estoy en EEUU. Aquí no sabes que estás viva». Ya mayor, la mujer que supo cautivar a toda un generación, fue detenida por un fanático en la calle y atónito le preguntó, si realmente era ella. Mustia y sola, le respondió: «Yo fui Greta Garbo», contestó la actriz.

Nadie sabe el por que de la decisión de retirarse a los 36 años, estando en el pináculo de su carrera. Sus años siguientes, son un real misterio. Se convirtió en una más de las leyendas de Hollywood. Ha sido uno de los misterios que envuelve al idolo del Siglo XX. Es asi como la casa de subasta Swann Auction Galleries saca a la venta el jueves, 65 cartas que la actriz envió  a su amiga íntima, Salka Viertel. La chica era una guionista austrohúngara que se mantuvo a su lado durante su anonimato.

«Sigo siendo una niña cansada …..Significas mucho para mi»

«Salka, se que soy una persona imposible… No voy a ninguna parte, no veo a nadie, al igual que en Brentwood… Tal vez vengas a rescatarme… Es difícil y triste estar sola, pero a veces es aún más difícil estar con alguien… No es extraño que no recuerde haber vivido con el señor Vidal. Nunca escucho un nombre, ni nada, cuamdo estoy en algún lugar… Sigo siendo una niña confundidad y cansada… Significas mucho para mi. Espero que lo sepas»: decía una de las cartas de fecha, 1937.

En realidad, son cerca de 100 hojas escritas de puño y letra por la actriz a su confidente entre 1932 y 1973. Su despedida, revela su complacencia hacia su amiga, lo hacia con  G. G o simplemente Tusha o Tucha. Su valor es incalculable, ya que recoge la angustia o serenidad con que la actriz vivía su vida. Por supuesto, la casa de subasta las ha estimado en un valor entre los 40.000 y los 60.000, es decir entre los 36.000 y los 54.000 euros.

Su confidente y amiga Viertel, siempre se describió como » ni lo suficientemente hermosa ni joven» para convertirse en una estrella. Fue la guionista preferida de la Garbo. como los de La reina Cristina de Suecia (1933) o Anna Karerina (1935). Muchas de estas cartas, escritas por la estrella nórdica, fueron dirigidas a Klosters, Suiza. A este lugar, se había mudado en 1953 para estar cerca de su hijo, el escritor Peter Viertel, casado con la estralla de cine escocesa  Debora Kerr.

Cartas cargadas de sentimientos

Sus cartas eran escritas con suma delicadesa, para no herir  a los que ella nombraba en las mismas. Sus primeras cartas, Garbo critica a directores de cine y hace escrutineos  sobre los guiones en los que trabaja. Después, en otras habla de que no tiene amantes, pero que eso no le impide tener problemas. Al final, en su última etapa, las cartas cuenta una vida llena de tedio y aburrimiento, tirada en la cama, creyendo que han pasado años.

«Estoy viviendo con terror y absoluta tristeza», confiesa. «Si no escuchas noticias mías no sabrás que te amo, pero lo hago, y para siempre.(…) Pienso en ti constatemente y daría cualquier cosa por volver a los días en que podía coger mi buggy y conducir hasta la calle Myberry para verte. A ti, tan vibrante y maravillosa», redacta en otra carta dirigida  a Viertel. También, la inspiró a escribir su historia de inmigrante y en 1969 la astro húgara publicó su autobiografía, La bondad de los extraños. Su muerte ocurrió en 1978 y Garbo en 1990 con 84 años de edad.

Solo así se conocieron sus secretos

Ha tres años de su muerte, 1993, la casa de subasta Sotheby′s de Londres, arrasó con la muralla que la actriz había levantado en su entorno. Después de presentar a coleccionistas 66 cartas repletas de sentimiento de la actriz hacia la guionista. Fue entonces que, un aficionado de Florida las compró. Ahora son subastadas por un propietario privado. Del mismo modo, hace dos años, Sotheby′s subastó otro paquete de cartas. Ya estas estaban dirigidas a la condesa sueca Marta Wachmeister. El tema continua exponiendo la misma tristeza y el mismo dolor de las anteriores. Nunca fue feliz. Llegó a un mundo donde sus preferencias no se entendían. «Nunca dije: ‘Quiero estar sola», explicó en 1955 a la revista Life. Solo dije:«¡Quiero que me dejen en paz! Ahí esta la gran diferencia».