Rafael Emilio Silveira: La Marcha de Caracas…

TIEMPO DE CAMBIO

       RAFAEL EMILIO SILVEIRA

LA MARCHA DE CARACAS… La marcha del 1 de septiembre, convocada por la Mesa de la Unidad Democrática y protagonizada por más de un millón de venezolanos cansados del atropello y humillaciones a las que somos sometidos por un estamento político que parece disfrutar el sufrimiento de la gente, ha sido calificada por analistas nacionales e internacionales, como la mayor concentración humana en el continente americano y una de las concurridas en la historia del planeta. Es la expresión de un pueblo que se ha decidido a cambiar para bien el actual estado de cosas y así darle paso a un nuevo gobierno que se preocupe y ocupe de los problemas que hoy en día padecen los habitantes de este país. No fueron suficientes para contener la determinante presencia de los venezolanos, las amenazas, las cadenas del terror por radio y televisión, la arremetida contra dirigentes políticos de la Unidad, apresándolos y roleteándolos de un sitio de reclusión a otro, la destrucción de vías para tener la excusa de hacer falsas reparaciones para obstruir el libre tráfico de vehículos, el despido de trabajadores utilizando métodos discriminatorios copiados de los manuales del nazi fascismo.

No solo fueron estas artimañas ya descritas, sino que en una situación de desesperación que casi los lleva a la locura, fueron a los terminales de pasajeros a amenazar a las líneas de transporte público que prestan allí sus servicios, prohibiéndoles viajar a Caracas el día jueves, bajo amenaza de suspensión del permiso de tránsito. Pero la cosa no quedo ahí; cuando ya las unidades de transporte rodaban hacia Caracas, fueron retenidas en alcabalas y atacadas por bandas armadas dispuestas por el oficialismo para sabotear la ruta que conduciría a la capital. Así fue atacado con disparos el vehículo que conducía a la representación de Santa María de Ipire y El Socorro, los autobuses que transportaban a la gente de Altagracia de Orituco fueron retenidos por la Guardia Nacional por más de siete horas en la alcabala de Pardillal, hasta que llegaron bandas armadas del oficialismo para atacar cobardemente a los pasajeros. La misma suerte corrieron las unidades de transporte movilizadas desde Valle de la Pascua.

Por otra parte usaron el marcaje selectivo para hostigar al liderazgo de la Unidad, así vimos como en alcabalas de la policía de Aragua fueron arbitrariamente detenidos el Ing. Pedro Loreto, alcalde del municipio Leonardo Infante, Orlando Hernández, alcalde del municipio Julián Mellado y el Econ. Oswaldo Smarrelli, miembro del comité ejecutivo seccional de Acción Democrática, con la intención predeterminada de impedirles asistir a la marcha. Mientras tanto el alcalde del municipio Chaguaramas era hostigado por la vía administrativa para que tuviera que ocupar ese día atendiendo citaciones ubicadas intencionalmente en el tiempo de manera que le impidiera también asistir. Lamentablemente para ese oficialismo que languidece ante la respuesta certera del pueblo y su liderazgo, ninguna de estas vulgares triquiñuelas sirvió para desgastar la presencia multitudinaria de esa determinante mayoría.

CONATEL, LA DESESPERACION Y LOS ABUSOS.. Vimos al presidente de la republica expresarse de manera desesperada y soez sobre la progenitora de Henry Ramos Allup en su pírrica concentración de Plaza Venezuela, en cadena nacional y horario para todas las edades. Este tipo de expresiones califica peor a quien las profiere, que a las personas que quiere ofender, sin duda, esos términos no son propios del más alto dignatario de un país que respete a sus mujeres y que se respete a si mismo.